Helena Rubinstein es, en primer lugar, el nombre de una reconocida dama de origen polaco, que en la trayactoria de su vida estuvo a punto de convertirse en la mujer más rica del planeta. Fue ella la que decidió, en 1902, que sus planes empresariales irían encaminados hacia la cosmética y los perfumes.
Helena Rubinstein dio comienzo a su gran corporación en Australia, donde residió durante una parte de su vida. Pocos años después fueron apareciendo más sucursales en todo el mundo.
Helena Rubinstein presume, sobre todo, de los efectos únicos que sus cremas y otros productos tienen sobre la piel. Las fragancias de los perfumes se caracterizan por ser suaves, ligeras y agradablemente frescas.