La hipersensibilidad o alergia al flúor tiene solución. Basta evitar el uso de productos dentales que contienen flúor. Cuida tus dientes con una pasta de dientes sin flúor para matener una buena higiene bucal y protegerlo de las caries. El flúor es, gracias a su capacidad de proteger el esmalte dental de las bacterias, un ingrediente que se encuentra en casi todos los dentífricos. La pasta de dientes sin flúor, sin embargo, prescinde del flúor en su fórmula sin renunciar a la máxima protección de los dientes y las encías.
Esta sustancia está presente en el agua, en los peces marinos, la sal o el té negro. Y, por supuesto, también en la mayoría de los dentífricos. El flúor es un elemento imprescindible para nuestro organismo, importante para la salud de los dientes y los huesos. No obstante, al usar productos que contienen flúor es bueno ser precavido, ya que la sobredosis puede provocar fluorosis dental, que se manifiesta en forma de manchas en los dientes. Si prefieres evitar la ingesta excesiva de flúor, prueba una pasta de dientes sin flúor.
Elijas el tipo de pasta de dientes que elijas, no te olvides de los demás aliados para la lucha contra la placa dental como es el cepillo de dientes, el cepillo interdental o el hilo dental.