



Descripción M. Micallef Jewel Collection Note Vanillée Nectar
Notas de cabeza Las notas de cabeza se perciben en los primeros minutos, inmediatamente después de la aplicación del perfume. Aportan la primera impresión del aroma, habitualmente son muy intensas, pero duran poco. | mandarina, cítricos |
Notas de corazón Las notas de corazón empiezan a percibirse después de las notas de salida, o sea, las llamadas notas de cabeza. Por lo general, duran 2-3 horas. | jazmín |
Notas de fondo La notas de fondo representan la última y la más duradera fase del perfume. Son las notas que va desprendiendo el perfume antes de desaparecer, normalmente son unas 4 horas, pero pueden durar incluso todo el día. | vainilla, ron, ámbar, madera de sándalo |
Tipo de fragancia | almizclada, gourmand |
Un excitante elixir perfumado con un seductor toque de vainilla
Intenso, sensual e inolvidable: así es el eau de parfum M. Micallef Jewel Collection Note Vanillée Nectar. Combina notas cálidas y frescas con una elegancia refinada para convertirse poco a poco en una fragancia rica y duradera. Su composición concentrada garantiza una conexión profunda con la piel, dejando una estela cautivadora que te acompañará de la mañana a la noche.
- aroma gourmand de vainilla y ámbar gris
- el perfumista Paulo de Moraes es el creador de la fragancia
- se lanzó al mercado en el año 2023
Composición de la fragancia:
La chispeante apertura está protagonizada por la fresca mandarina y los jugosos cítricos, que despiertan los sentidos con su energía vibrante. La fragancia se transforma poco a poco en un corazón floral con elegantes notas de jazmín que se despliegan como pétalos de seda en una brisa cálida. Las notas de fondo traen una transformación seductora: el ámbar gris y el sándalo añaden profundidad terrosa, mientras que la vainilla aterciopelada con notas de ron crean un regusto embriagador y duradero.
Historia de la fragancia:
El frasco de la fragancia Note Vanillée Nectar es el arquetipo del lujo y el arte, combinando la belleza bruta de los elementos naturales con una elegancia sutil. El tapón de oro macizo de textura rugosa recuerda a una piedra preciosa sin trabajar, que contrasta con el cristal del frasco tallado con precisión, cuyos bordes ornamentados captan la luz, creando un brillante juego de reflejos.