Los perfumes franceses de Cacharel se inspiran en la auténtica feminidad, son juguetones, dinámicos y coloridos. Destacan por sus tonos apasionados y sus ingredientes refinados y combinan influencias tradicionales y modernas.

El fundador de la marca, Jean Bousquet, era originalmente solo diseñador. Cacharel se convirtió en una de las primeras casas de moda que en los años 60 presentó una colección prêt-à-porter como alternativa a la alta costura. Con su frescura y sus modelos de moda, la marca se adelantó a su tiempo no solo en el mundo de la moda, sino también en el de los perfumes.

El perfume Cacharel celebra la feminidad y el romance y los representa de distintas formas: con el legendario perfume para chicas Anaïs Anaïs, con el apasionado eau de parfum Amor Amor de Cacharel o con el presuntuoso e independiente Yes I Am. Todos los perfumes de Cacharel son la expresión olfativa de algunas de las etapas de la vida de cada mujer.