El aceite de moringa, preciado por sus propiedades hidratantes, nutritivas y regeneradoras, es uno de los aceites faciales y capilares más populares. Gracias a su rico contenido en vitaminas, minerales y ácidos grasos omega, combate eficazmente las arrugas, el acné y la sequedad en la piel y regenera intensamente el cabello dañado y quebradizo. Además, su gran capacidad antioxidante ayuda a retrasar el envejecimiento de la piel, dejando la piel radiante y flexible. Descubre el poder del aceite de moringa cuyos efectos beneficiosos se conocen desde hace más de 5.000 años.
El aceite de moringa es conocido también bajo el nombre de behen o aceite de behen, debido a su alto contenido en ácido behénico que destaca por sus propiedades suavizantes. Este ácido graso saturado es muy utilizado en la elaboración de productos para el cuidado de la piel como sérums faciales, acondicionadores y mascarillas capilares.
El aceite de moringa se absorbe perfectamente y no deja película grasa en la piel, limpiando y calmando todos los tipos de piel, incluida la piel sensible y madura. La piel muy seca apreciará sobre todo sus efectos hidratantes, sin embargo, el aceite de moringa tiene mucho que ofrecer también a la piel con tendencia al acné, ya que ayuda a controlar la producción de grasa y eliminar las manchas de pigmentación en el rostro.
¿Qué otros beneficios aporta el aceite de moringa?
Acentúa tu belleza natural con este elixir embellecedor que supuestamente usaba en los tiempos remotos la mismísima Cleopatra. Con cada gota del aceite de moringa tu cabello lucirá más suave, nutrido e hidratado. Descubre también otros aceites de uso cosmético, como el aceite de albaricoque con efecto rejuvenecedor o el aceite de lavanda con efecto calmante.